Es hatte
ein Mann einen Esel, der schon lange Jahre
die Säcke unverdrossen zur Mühle
getragen hatte, dessen Kräfte aber nun
zu Ende gingen, so daß er zur Arbeit
immer untauglicher ward. Da dachte der Herr
daran, ihn aus dem Futter zu schaffen, aber
der Esel merkte, daß kein guter Wind
wehte, lief fort und machte sich auf den
Weg nach Bremen: dort, meinte er, könnte
er ja Stadtmusikant werden. Als er ein Weilchen
fortgegangen war, fand er einen Jagdhund
auf dem Wege liegen, der jappte wie einer,
der sich müde gelaufen hat. »Nun,
was jappst du so, Packan?« fragte der
Esel.
Tenía
un hombre un asno que durante largos años
había transportado incansablemente
los sacos al molino; pero al cabo vinieron
a faltarle las fuerzas, y cada día
se iba haciendo más inútil para
el trabajo. El amo pensó en deshacerse
de él; pero el burro, dándose
cuenta de que soplaban malos vientos, escapó
y tomó el camino de la ciudad de Brema,
pensando que tal vez podría encontrar
trabajo como músico de la ciudad. Después
de andar un buen trecho, se encontró
con un perro cazador que, echado en el camino,
jadeaba, al parecer, cansado de una larga
carrera. - ¿Por que jadeas tan fuerte,
amigo? -le preguntó el asno.