Mehrere
Jahre nachher, da der Marchese durch Krieg
und Mißwachs in bedenkliche Vermögensumstände
geraten war, fand sich ein florentinischer
Ritter bei ihm ein, der das Schloß seiner
schönen Lage wegen von ihm kaufen
wollte. Der Marchese, dem viel an dem Handel
gelegen war, gab seiner Frau auf, den Fremden
in dem obenerwähnten leerstehenden
Zimmer, das sehr schön und prächtig
eingerichtet war, unterzubringen.
Muchos
años después en que el Marqués,
debido a las guerras y a las malas cosechas,
se encontraba en una situación economica
precaria, un caballero florentino se dirigió
a él con intención de comprar
el palacio por su sitio precioso.
El Marqués, que tenía gran
interés en que la compraventa se
efectuase, ordenó a su esposa que
alojara al huésped en la ya mencionada
habitación vacía, que estaba
muy bien amueblada.
Aber
wie betreten war das Ehepaar, als der Ritter
mitten in der Nacht verstört und bleich
zu ihnen herunterkam, hoch und teuer versichernd,
daß es in dem Zimmer spuke, indem
etwas, das dem Blick unsichtbar gewesen,
mit einem Geräusch, als ob es auf
Stroh gelegen, im Zimmerwinkel aufgestanden
mit vernehmlichen Schritten langsam und
gebrechlich quer über drei Zimmer
gegangen und hinter dem Ofen unter Stöhnen
und Ächzen niedergesunken sei.
Pero el matrimonio quedó perplejo
cuando el caballero, a media noche, pálido
y turbado, apareció jurando y perjurando
que había fantasmas en la habitación
y que alguien invisible se movía
en un rincón de la habitación,
como si estuviese sobre paja, y que se podían
percibir pasos lentos y vacilantes que la
atravesaban y cesaban al llegar a la estufa,
entre ayes y lamentos.