Se tendrá que discutir en el futuro el hecho de que
la declinación resulta difícil incluso
a personas cuya lengua materna es el alemán. En
ciertas regiones, como por ejemplo en Berlín, se
suele confundir el objeto directo con el objeto indirecto.
El caso más problemático es el genitivo,
que está a punto de desaparecer. En contra de
las reglas que los niños aprenden en la escuela,
los alemanes han decidido, aunque de manera inconsciente, abolirlo. Por esta razón usted ha visto
ya varias veces que no se usa.
Ahora usted se pregunta, pero si no existe un genitivo, ¿cómo
lo hacen? Muy fácil. Lo hacemos como los españoles,
utilizando una preposición. Tendremos que rediscutir
sobre este fenómeno, pero de momento nos bastan
algunos ejemplos.
Das
ist das Auto von jemandem,
den ich kenne.=
Es el coche de alguien que
conozco. Das ist das Auto
von niemandem, den
ich kenne.=
Es el coche de nadie que
conozca.
¿Qué hacemos? Pues fácil, lo hacemos como las personas
de habla española. Formamos el genitivo con la preposición von
(de). Lo único que llama la atención es el hecho, de que jemand
y niemand están en dativo, pero de esto vamos a hablar en el capítulo Algunas
preposiciones.