Da wird der Geist Euch wohl dressiert,
In spanische Stiefeln eingeschnürt,
Daß er bedächtiger so fortan
Hinschleiche die Gedankenbahn,
Und nicht etwa, die Kreuz und Quer,
Irrlichteliere hin und her.
Dann lehret man Euch manchen Tag,
Daß, was Ihr sonst auf einen Schlag
Getrieben, wie Essen und Trinken frei,
Eins! Zwei! Drei! dazu nötig sei.
Allí os adiestrarán
bien el pensamiento,
calzándolo con normas
para que avance por la senda del espíritu
y no persiga bagatelas vagando de un lado a otro.
Entonces aprenderéis un día
que lo que antes hacíais de un golpe,
como el comer o el beber,
ahora requiere uno, dos y tres.
Otra vez tenemos una crítica de la vida académica. Aunque es Mefistófeles
que lo dice se puede partir del principio que también expresa la opinión
del Fausto. En el clasismo alemán se exigía la identidad entre
forma y estilo lo que quiere decir que el estilo es contenido. Los trabajos que
se escribe para la universidad son estilo sin contenido, quiere decir, que la
manera como se escribe algo es más importante que el contenido. Siempre
hay que respetar el uno, dos y tres. Hay que escribir en la introducción
que tal tío dijo tal cosa y aquel otro algo distinto y que por tanto la
cuestión científica que se plantea es esta, después viene
el contenido con muchas citas para que suene científico (importantísimo
es citar correctamente, primero el nombre, después la ciudad, después
el año cuando apareció el libro, después un par de otras
cosas) y después viene el resumen y en este resumen hay que decir que
este trabajo solo era el inicio de una larga investigación porque no se
sabe todavía si tal escritor escribió sus versos porque su esposa
no podía tener hijos o si los escribió porque estaba enamorado
de otra tía. Aceptando este uno, dos y tres se aprueba todos los exámenes.
En el fondo todo este juego financiado por los impuestos de la gente no interesa
a nadie pero así lo hicieron hace 200 años y así lo van
a hacer los próximos doscientos años, si el estado no decide de
dejar de financiar estas tonterías.
En pocas palabras tenemos también una descripción de como funciona
el cerebro normal o sea uno que no haya sido deformado todavía por la
rutina académica. El cerebro humano piensa de manera asociativa, puede
establecer relaciones entre muchas cosas y crear cosas nuevas. Mucha gente cree
que es un aparato tan eficaz porque puede pensar de manera sistemática
pero en esto justamente no consiste el poder del cerebro humano porque cualquier
computadora es capaz de pensar más lógico, más sistemático
y sobre todo mil veces más rápido. La fuerza del cerebro humano
no consiste en trabajar algoritmos, esto cualquier computadora lo hace mejor.
Pero es capaz de establecer nuevas relaciones entre las cosas lo que por ejemplo
le permite de crear computadoras. La descripción que da Mefistófeles,
que los pensamientos van vagando de un lado a otro, es acertada, pero esta manera
de pensar es muy eficaz y creativa. Para que no haya malentendidos. El autor
de este capítulo da clases de programación a un nivel bastante
alto, incluso en empresas, no tiene realmente problemas en pensar lógico.
No obstante cree que es cierto lo que dice Mefistófeles.