Lo
más difícil en alemán es la Deklination.
Hemos visto que el alemán aclara las relaciones
entre los objetos a través de la Deklination,
mientras que el español lo hace a través
de las preposiciones. La solución alemana no es
realmente muy inteligente, porque en vez de aprender
la preposición, que siempre es la misma sin
importar que sea un pronombre, un artículo indefinido
o un artículo definido, hay que aprender varias
declinaciones, la Deklination de los pronombres, la
Deklination de los artículos definidos y la
Deklination de los artículos indefinidos. Más
tarde, en el capítulo Pronombres
posesivos vamos a ver, que también hay que
declinar los pronombres posesivos. Si hemos logrado
explicar la función de la Deklination en alemán,
entonces el lector ya ha aprendido lo más difícil
de la gramática alemana. El sistema alemán
puede parecer absurdo a mucha gente, pero hay que
tener en cuenta que muchas lenguas, como el turco, el
ruso, el árabe, el polaco y muchas más,
funcionan como el alemán. También hay
que ver que el latín, del cual la lengua española
es una hija, conoce la Deklination. A lo largo de la
historia, los pueblos romances han convertido el latín
en algo más lógico y coherente, pero
muchas otras lenguas no han evolucionado en esta dirección
y han conservado la Deklination. El lector tiene que
juzgar él mismo, si esto era una idea buena o
no. Pero de vez en cuando tenemos que aceptar los hechos
históricos, nos gusten o no.
Para declinar un sustantivo tenemos que distinguir
entre la declinación
del artículo (sea indefinido o definido) y la declinación del sustantivo.
En cuanto se refiere a los artículos hay sólo tres declinaciones,
la masculina, la femenina y la declinación neutra. La declinación
de los sustantivos es más difícil, porque el alemán conoce
en total once declinaciones diferentes, aunque a decir verdad, las diferencias
entre una y otra no son tan enormes. Las diferentes declinaciones, las hemos
explicado en el capítulo La
declinación
en alemán. Para saber a qué declinación pertenece
un sustantivo hay que conocer el plural en nominativo.
Veamos
algunos ejemplos:
die
Kartoffel = die
Kartoffeln
la
patata = las patatas
No
sufre ningún cambio de vocal
y es femenino. Por esto pertenece
al grupo b.
der
Brauch = die Bräuche
la
costumbre = las costumbres
Sufre
un cambio de vocal y es masculino.
Por esto pertenece al grupo d.
das
Kanu = die Kanus
la
piragua = las piraguas
No
sufre ningún cambio de vocal,
es neutro y forma el plural en
-s. Por esto pertenece al grupo g.
der
Affe = die Affen
el
mono = los monos
No
sufre ningún cambio de vocal,
es masculino y forma el plural -n.
Por esto pertenece al grupo h.
die
Frau = die Frauen
la
mujer = las mujeres
No
sufre ningún cambio de vocal
y es femenino. Por esto pertenece
al grupo b. El hecho de que termina
en n no tiene ninguna importancia,
porque sólo sustantivos masculinos
pueden pertenecer al grupo h.
der
Becher = die Becher
el
vaso = los vasos
No
sufre ningún cambio de vocal
y es masculino. Este sustantivo es
un caso un poco excepcional, porque
el singular es idéntico al
plural. Este tipo de sustantivo sólo
existe en masculino y pertenece al
grupo i.